Camila Gómez Ares: «En Boca estamos bien, pero se podría mejorar el tema viáticos»
Vamos primeras con River y el 18 jugamos con la UAI Urquiza que también está ahí arriba.
La diferencia con los varones es abismal porque el fútbol masculino es el motor del club. Es lo más importante en la mayoría de los clubes, pero creo que respecto de eso, nosotros al ser fútbol también, solo al cambiar el género, es mucha la diferencia.
Empezando por el sueldo: nadie pide que cobremos lo que cobran los hombres porque sería una locura, pero mejorar lo que es el sueldo ya que nosotras lo hacemos amateur y de corazón, porque nos gusta.
Aún no nos reunimos con Anró, pero está en vistas está la reunión. Ya lo hablamos con Jorge y él siempre se mostró muy predispuesto para juntarse y creo que uno de nuestros motivos va a ser el viático. Más allá de eso, el club siempre se portó de lo mejor con nosotras. Dentro de las posibilidades que da el fútbol femenino, Boca es el club que mejor está, no nos podemos quejar. Venimos cobrando esta plata desde hace muchos años y por como está el país… hay chicas que se vienen desde muy lejos, tardan 2 horas y tienen que salir 2 horas antes y todo aumentó.
Ahora estamos entrenándonos cuatro veces por semana. Más el partido del fin de semana es casi el mismo entrenamiento que el de los varones.
Con el fútbol comencé de chica, porque tengo un hermano más grande de quien seguí los pasos como para meterme en el fútbol. Quizás de chica no te das cuenta que es un ambiente machista, porque yo empecé a los 4 años, y hace 15 años el fútbol femenino no era lo que es ahora, que las chicas chiquitas juegan y los padres no tienen problema, hay escuelitas, hay muchas más cosas. Yo cuando arranqué jugaba con varones y para mis papás era raro que yo quisiera jugar al fútbol.
Sufrí discriminación de chiquita. Mi mamá me cuenta sobre un partido en el que yo no estaba fichada en el club y jugaba con varones y cuando iba a entrar el técnico del otro equipo sacó a su equipo de la cancha porque entraba una mujer. Yo ahí debía tener 6 años, ¿qué les podía molestar que jugara un rato? Después, los padres del otro equipo le pidieron disculpas a mis papás, al técnico, porque fue una actitud del técnico que era demasiado machista.